Comentario previo:
Parece que he empezado el año un poco agitado de más y muy protestón. Me lo habéis comentado más de uno y debo de reconocer que así ha sido. Pido disculpas por manifestar tan abiertamente mi disgusto y hago propósito de la enmienda para no aburrir ni incomodar a nadie.Si se me van ocurriendo ideas positivas para ir capeando esta situación de pérdida de poder adquisitivo, os las iré contando. Pero trataré de rebajar el tono de queja que he empleado en los primeros post de este año.
Ahí va la idea para hoy: Recuperar la filosofía del trueque. Si te gusta hacer algo (por ejemplo, cocinar) y tienes un vecino mañoso con la electricidad, puedes proponerle que te haga la reparación de esa lámpara que tienes averiada a cambio de una cena. Te ahorras el dinero del arreglo o de una nueva lámpara, disfrutas cocinando y haces amistades.
Vayamos con la receta que es bien sencilla. Se trata de una ensalada de pasta aliñada con el ajo de calabaza que os presentaba el otro día. Por supuesto, se puede hacer con un alioli normal (de hecho es lo que hago con más frecuencia), pero os aseguro que con este ajo de calabaza queda fenomenal. El complemento de las alcaparras es un toque fundamental. La lechuga servirá de base y con los tomates cherry y los huevos de codorniz cocidos redondearemos el plato. Si eres de los que soporta bien el ajo por la noche, esta puede ser una cena completa.
Ingredientes (para 2 raciones):
- 150 g. de pasta (usé el tipo fideuá de la marca Gallo).
- 3 c/s (cucharadas soperas) de ajo de calabaza.
- 1/2 lechuga iceberg.
- 3 tomates cherry.
- 3 huevos de codorniz cocidos.
- Un puñado de alcaparras (en Murcia les llamamos tápenas).
- Sal.
- AOVE (aceite de oliva virgen extra).
Pasos:
- Cocer la pasta, procurando dejarla un poco entera. Poner algunos aromáticos -tomillo, nuez moscada, orégano...- en el agua de cocción además de la sal . Enfriar bajo el chorro de agua fría y escurrir.
- Mezclar la pasta con el ajo de calabaza, procurando que quede bien impregnada toda con la salsa.
- Lavar la lechuga y cortarla en juliana gruesa. Colocarla en el fondo de plato y aliñarla con un poco de sal y un chorrito de AOVE.
- Colocar sobre la lechuga la pasta impregnada con el ajo de calabaza.
- Partir por la mitad los tomates cherry (lavados) y los huevos de codorniz cocidos (pelados). Colocar los trozos en el borde del plato y aliñarlos con un poco de sal y AOVE.
- Sobre la pasta colocar el puñado de alcaparras, en cantidad al gusto.
